Este juego ofrece numerosos beneficios para el desarrollo de los niños, ya que promueve habilidades manuales, el ingenio, el conocimiento de formas y colores, así como el equilibrio y la organización espacial en tres dimensiones. Los niños podrán utilizarlo para construir cubos y diversas figuras, estimulando así su creatividad y pensamiento abstracto.
Además, este material es especialmente adecuado para el nivel preescolar y primaria, ya que se adapta a las necesidades y capacidades de los niños en estas etapas de su desarrollo. Su edad aproximada recomendada es a partir de los 5 años, aunque también puede ser disfrutado por niños mayores.
Al jugar con este juego, los niños también estarán fortaleciendo su motricidad fina, ya que requerirá de habilidades para manipular las piezas y ensamblarlas correctamente. Esta experiencia lúdica y educativa les permitirá aprender de forma práctica y divertida, fomentando su crecimiento integral.